Si estás buscando una forma de ahorrar dinero y tener control sobre la calidad de tu cannabis, cultivarlo en casa puede ser una excelente opción. Aunque pueda parecer intimidante al principio, con los consejos correctos, puedes tener una cosecha exitosa.
En este blog, te daremos 12 consejos esenciales y aspectos básicos que debes considerar antes de comenzar a plantar para ayudarte a comenzar tu viaje en el cultivo de cannabis.
Es fundamental conocer algunos temas clave para garantizar una cosecha exitosa:
- Proporciona luz adecuada: Las plantas de cannabis requieren una cantidad significativa de luz para crecer y florecer adecuadamente. Si utilizas luz artificial, opta por lámparas de vapor de sodio. En caso de usar luz natural, selecciona un lugar con muchas horas de sol directo. Cuanta más luz reciban las plantas, más cogollos producirán.
- Respeta el fotoperiodo: Es fundamental asegurarte de que el fotoperiodo se cumpla correctamente. No interrumpas las horas de luz, y proporciona a la planta la cantidad necesaria en el momento adecuado. Durante la fase de floración, la oscuridad es crucial, ya que la exposición a la luz en este período puede afectar negativamente la producción de flores.
- Controla la temperatura: Las plantas de cannabis crecerán mejor si se mantienen dentro de un rango de temperatura adecuado. Si es posible, evita situaciones extremas de calor o frío. Asegúrate de elegir un lugar adecuado para el cultivo, y considera las condiciones climáticas antes de comenzar.
- Monitorea la temperatura: Invierte en un termómetro que registre las temperaturas máximas y mínimas. Esto te permitirá saber qué sucede con la temperatura a lo largo del día y si algún valor se desvía peligrosamente.
- Regula el pH del agua: Dependiendo del lugar donde vivas, el agua puede tener un pH adecuado o no. Es fundamental que verifiques y ajustes el pH del agua de riego si es necesario. Hacerlo asegurará un crecimiento y floración saludables.
- Elige la genética adecuada: La calidad de tu cannabis depende en gran medida de la genética de la planta. Asegúrate de adquirir semillas de buena calidad, incluso si son un poco más caras. Invertir en una buena genética te permitirá obtener mejores resultados.
- Utiliza tierra de calidad y macetas adecuadas: Compra tierra de buena calidad y selecciona el tamaño de la maceta según tus necesidades y espacio disponible. Más tierra implica menos trabajo (menos riego y abono), pero también puede significar plantas más grandes y un mayor gasto inicial.
- Mantén la calma: Aunque puede parecer que el cannabis es una planta delicada, en realidad es bastante resistente. Si sigues las pautas básicas y mantienes las condiciones adecuadas, las plantas podrán superar la mayoría de los problemas que puedan surgir.
- Controla el olor: Algunas variedades de cannabis tienen olores más fuertes que otras, especialmente durante la fase de floración. Si el olor es un problema, investiga soluciones para minimizarlo, aunque algunas de ellas pueden ser costosas.
- Abonado adecuado: No corras riesgos con el abono. Utiliza abonos específicos para cannabis siempre que sea posible, y sigue las instrucciones del fabricante. Si no puedes o no quieres adquirir abonos específicos, opta por abonos para plantas con flor en la fase de floración y abonos para plantas verdes en la fase de crecimiento.
- Ten precaución en la fase de floración: Durante la floración, las plantas de cannabis son más sensibles a cambios en su entorno y a enfermedades. Asegúrate de controlar de cerca el riego, la humedad y la temperatura. También es importante estar atento a la aparición de plagas y enfermedades, ya que, en esta etapa los problemas pueden afectar directamente la calidad y cantidad de los cogollos. Si detectas algún problema, actúa rápidamente y de manera eficiente para minimizar el impacto en la producción final.
- Cosecha y curado adecuados: El momento de la cosecha y el proceso de curado son fundamentales para obtener cogollos de calidad. La cosecha debe realizarse cuando los tricomas (pequeñas glándulas de resina) presenten un color ámbar. Esto indica que los cannabinoides han alcanzado su punto máximo. Una vez cosechados los cogollos, es esencial realizar un secado y curado adecuados para conservar su sabor y potencia. El secado debe realizarse en un lugar oscuro y ventilado, y puede durar entre una y tres semanas. Posteriormente, los cogollos deben ser almacenados en frascos herméticos en un lugar oscuro y fresco, abriendo los frascos una vez al día durante las primeras semanas para permitir la liberación de humedad y gases. Un buen curado puede durar de 2 a 4 semanas, aunque algunos cultivadores prefieren un curado más largo de varios meses.
Teniendo en cuenta estos aspectos estarás mejor preparado para comenzar a plantar, recuerda que cada tema que revisamos es solo un breve concepto para que tengas un panorama global claro de todo lo que necesitas para ser un Grower exitoso.
